Voces del campo

 Ayer me llegó una convocatoria para un concurso de microcuento. Siempre me ha parecido magistral poder fotografiar un instante diciendo muchas cosas e insinuando otras cuantas en solo 60 palabras. Sin embargo, nunca me había lanzado a hacer este ejercicio literario. Este concurso, que además es sobre temáticas del campo, me pareció una linda oportunidad para empezar a hacerlo. Aquí van mis dos postulaciones, dedicadas con cariño, admiración y respeto a mi amiga Nidia, su madre la Señora María y los animales de su finca. 

Glamping

Las ciclomontañistas pedalean conversando. Riendo. A 3800 m s. n. m., la Señora María aguarda con su caldo de papa, peto con leche del ordeño, huevos campesinos y jugo de tamarillo. Desayunan exhaustas. Salen a ver la conejera. A lo lejos, las vacas. Luego el glamping que transforma su existencia en turismo, porque del campo ya no vive nadie.


Al aire

Sobre los fogones de leña y los techos de paja, cuelgan las mazorcas para secar y conservar semilla. Paipa, pira, blanco y duro amarillo. Símbolos de fertilidad y abundancia. Y al mismo tiempo, nada que se venden los conejos.


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